Youtube prepara para finales de 2015 su servicio de pago

Accedemos a YouTube, pinchamos en el vídeo que queremos ver, y cuando estamos acomodados, con todas las expectativas en lo más alto, no aparece el contenido al que queríamos acceder, sino un molesto anuncio que nos hace perder parte de nuestro valioso tiempo en observar como una marca se publicita y el almacenador de vídeos se enriquece. YouTube quiere hacernos evitar esta irritante situación, para ello está preparando un servicio de suscripción mediante el cual no tengamos que ver anuncios a cambio del pago de una cuota mensual.

Así se lo han afirmado fuentes de Google al diario El País, en el cual fue recogida esta información de la que los rumores ya eran más que simples habladurías, sin embargo que un rotativo de tal renombre lo afirme hace que de una vez por todos esos rumores cojan forma veraz. El servicio se espera que llegue para finales de 2015, y no dejará indiferente a nadie. Numerosos youtubers ya habían planteado el debate a sus suscriptores, en torno a si aceptarían paga un importe por acceder a su contenido.

Ese importe por lo de ahora es desconocido, pero se supone que no será muy excesivo, una cuota mensual a partir de la que entre empresa y creador de contenidos se repartirían las ganancias. Se ha apuntado a que el creador del contenido recibiría un 55% del beneficio, este hecho generará numerosas discusiones, ya que la mayoría de youtubers, probablemente reclamen recibir un mayor porcentaje por su trabajo, que se verá absorbido por la empresa.

La feroz competencia a la que está sometido YouTube es la razón que le ha empujado  tomar esta decisión, Netflix crece a pasos agigantados, y parece que el servicio alojamiento de vídeos busca no perder terreno respecto a alternativas de este tipo. Por lo de ahora la compañía ya ha enviado un mensaje a los creadores audiovisuales con cuenta Creator Studio, donde se les avisa sobre este cambio y se les advierte sobre los nuevos términos de ganancias que van a establecer en YouTube.

En AndroDino no nos gusta lo que se hace desde el gigante de los vídeos, establece dos categorías de uso de sus servicios, los que pueden pagar y los que no pueden pagar, recuerda mucho al caso de Spotify. Esta estrategia no premia a los profesionales que generan contenido, solo beneficia a la empresa, que hace que de forma directa o indirecta la financies, ya sea viendo anuncios o rascando el bolsillo para no verlos. Solo nos queda esperar a que el importe a pagar sea mínimo, en ese caso tendría algo de sentido esta táctica, en caso contrario esto será un insulto al consumidor.